EL BLOG DE JAVI GALLEGO: ESTORVÍN - CUETO LOS BARRIALES - ROBEQUERAS

jueves, 20 de octubre de 2022

ESTORVÍN - CUETO LOS BARRIALES - ROBEQUERAS - CUADRO Y CUÉRRAVO (Tonín) 15-10-22

2ª ASCENSIÓN AL “ESTORVÍN”, “CUETO LOS BARRIALES”, “ROBEQUERAS”, “CUADRO” Y “CUÉRRAVO”. (Tonín).

15-10-22 (Sábado)

Jornada fructífera en cuanto a cumbres coronadas y en general por la ruta realizada a lo largo de la misma. Con casi un mínimo de participantes, solo dos, Mª Jesús y yo, nos hemos animado a intentar de nuevo lo que el invierno pasado nos impidió la nieve y el hielo. En esta ocasión conseguimos el objetivo principal, el pico Estorvín, (o Estorbín), así como otros cuatro de la sierra, el Cueto los Barriales, Robequeras, Cuadro y el Cuérravo. A todos ellos era la segunda vez que los subía desde que lo hiciera en el año 2011, aunque en aquella ocasión no contabilicé el Cueto Los Barriales como cima, considerándolo junto con el Robequeras una sola. Este Enero pasado algunos habíamos subido el Bolero y el Aguazones, la misma sierra, mientras que otro compañero sí llegó al Estorvín.

Sobre las 9:00 horas, con 7º C en la calle, recogía a Mª Jesús para salir minutos después de León por la carretera de Asturias. El amanecer había creado una bonita postal con unas nubes anaranjadas de gran belleza. Ahora avanzamos por esta nacional mientras el cielo se cerraba con más nubes hacia el Norte. Anoto aquí que en esos momentos aún íbamos sin una ruta definida, y lo explico. Habíamos comentado la posibilidad de hacer una travesía por un bonito hayedo en el Puerto de Pajares ya en la parte asturiana. El “problema” es que este año el otoño está muy atrasado y el colorido de los bosques aún no ha aflorado por completo, y así lo comprobamos en los que íbamos viendo en el trayecto, lo cual nos convenció de que no merecía la pena hacer dicha travesía.

A las 9:55 horas entramos en Tonín, aparcando al lado de la iglesia poco después. El cielo se mantenía cubierto y había signos de haber llovido por la noche. Nos preparamos para la marcha y a las 10:15 horas, a una altitud de 1260 metros, comenzamos a caminar por una de las calles de Tonín dejando una fuente atrás. Entre algunas casas avanzamos hacia el Norte para salir poco después del pueblo y cruzar un puente sobre el arroyo de Tonín, que quedaba ahora a nuestra izquierda. El ancho camino continúa dirección Norte por el valle del Cuadro en el que vemos algunas huertas y praderías en la vera del arroyo. Poco a poco cogemos altura sobre éste contemplando ya por delante la cumbre del Estorvín en la cabecera del valle.

Tras 1,500 km hechos llegamos a un desvío hacia el torrente por el que la vez anterior, en Enero, habíamos vuelto. El track del GPS que llevaba de subida directa al pico seguía el ancho camino, pero como sabíamos que por este lado se iba también cómodamente, optamos por hacer caso omiso a dicho track en ese tramo. Cruzamos un puente rodeado por ramaje para incorporarnos a un sendero que seguía ganando altura paralelo a una cerca de alambre. Ésta se encontraba muy destrozada y había que extremar la precaución por ser dicho alambre de espinos y cruzado en muchos sitios en el sendero. Las escobas que escoltaban esta senda se cerraban en algunos puntos y había que esquivarlas. A pesar de ello, y como ya anoté, era bastante cómoda y más “guapa” que el camino.

Ganamos bastante altura durante un tramo sobre el arroyo que se encajonaba bajo nosotros por la derecha y donde este invierno pasado tuvimos tanto problema por la nieve y matorral en la otra margen. Comenzamos a bajar hacia unas praderías en las que pastaban algunos caballos y donde nos incorporamos a un ancho camino que venía de la parte alta por el Oeste. El track del GPS continuaba por él hacia arriba ya que los que hicieron dicha ruta habían subido por el Cuérravo y el Cuadro antes del Estorvín. Nosotros queríamos ir directamente al principal, por lo que cruzamos de nuevo el arroyo, que en ese punto llevaba el nombre de arroyo Valle del Cuadro, por un puente muy estrecho, de madera, metal y sobre una base de rocas. Si se viene por la ruta que nosotros traíamos hay que tener un poco de cuidado en ese punto tras el puente para no desorientarse. El camino retrocede unos metros subiendo pero con dirección al pueblo de nuevo. Enseguida se encuentra el ramal que se desvía para cambiar el rumbo hacia la cabecera del valle entre altas escobas y arbustos donde vimos algunos servales del cazador cargados de rojos frutos. Entre todo ello vimos numeroso ganado pastando camuflado por las escobas. Había gran cantidad de terneros acompañados por sus madres.

Llegamos luego a una cancilla candada y con una puerta lateral tan estrecha que había que quitarse la mochila para cruzarla, así que optamos por saltarla. Tras un tramo más por el camino avistamos el refugio de la Braña Ortigal al otro lado del río. Hacia ella nos encaminamos cruzando el cauce en un lugar más estrecho y a las 12:00 horas, tras 4,700 km, llegamos a la misma. Se trata de un refugio, cerrado, y un corral vallado para el ganado a su vera. Se emplaza a 1586 metros de altitud y desde el mismo habíamos comenzado en Enero la subida por la loma contraria ya cargada de nieve y hielo.

Nosotros ahora continuamos la marcha por la senda que partía del mismo por la margen izquierda del río ganando más altura hacia la cabecera del valle. Cruzamos entre escobas y más ganado pastando acercándonos hacia donde el valle se iba curvando al Oeste. En ese punto hicimos una parada para tomar un tentempié ya con el Estorvín justo delante de nosotros. Atravesamos de nuevo el cauce en un lugar muy estrecho comprobando como justo unos metros por encima se encajonaba en una brecha rocosa donde podía verse una diminuta cascadita. La senda transcurría justo por su parte alta paralela al cauce y nos acercamos a su borde para ver mas detenidamente aquel desfiladero. Con más caudal tiene que formarse allí una cascada espectacular.

Avanzamos ya con rumbo Noroeste con la cabecera del valle a la vista en el collado del Cuadro. La senda comenzaba a subir más directamente por la ladera del pico Estorvín señalizada por algunos hitos de piedras. El ganado seguía moteando el paisaje e incluso vimos algunas vacas encaramadas en el borde mismo del cañón del río. Algunos regatos bajaban por esa loma que estábamos remontando formando hondos surcos de piedra al lado de los cuales subía la senda que cruzaba algunos tramos pedregosos. En el collado del Cuadro vimos personal y con el zoom de la cámara acerté a distinguir que iban en bicicleta. Algo después los vimos cruzar por la cresta de la sierra por encima de nosotros. Minutos después también pasó por el mismo sitio una pareja hacia la cumbre.

Más o menos siguiendo la senda marcada fuimos ganando altura por la pendiente loma hacia el Norte. La subida era fuerte, pero cómoda. El terreno montano dominaba la falda de este pico alternándose con algo piedra. No es un pico de caliza como muchos otros. Atravesamos algunos de esos regatos y surcos mientras girábamos un poco hacia el Nordeste donde teníamos la ya cercana cima. A las 13:35 horas alcanzamos la cresta a una altitud de 2080 metros. Por un sendero mucho más marcado dirección Este nos encaminamos para hacer este último tramo a la cima del Estorvín, que coronamos cuando eran las 13:42 horas y tras 7,000 km hechos.

En ella estaba la pareja que habíamos visto por la cresta minutos antes y con la que entablamos una agradable conversación. Eran de Asturias, además de cerca del pueblo en el que tengo yo familia. Fueron ellos los que nos indicaron la situación de ciudades como Oviedo o Gijón, que podían distinguirse perfectamente en el paisaje, así como otros puntos de esa provincia.

Desde esta atalaya de 2124 metros podían verse infinidad de cumbres, tanto leonesas como asturianas, ya que estábamos en el límite provincial. Voy a enumerar una mínima parte como ejemplo de las más destacadas. En la línea Norte asturiana distinguíamos perfectamente el macizo del Angliru con el Gamoniteiro destacando con su enorme antena. Otra sierra que sobresalía, ahora más al Este, era la del Sueve con el pico Pienzu también visible. Girando al Este, los inconfundibles Picos de Europa, y delante de ellos, Peña Ten. Más cercana estaba la sierra que hicimos no hace mucho desde el puerto de Piedrafita, también visible, con el Cueto Vea, Pico La Laguna o el Cueto Moxicu, entre otros. Siguiendo el cordal en el que estábamos por el Sudeste teníamos el Bolero y Aguazones, ambos ascendidos en Enero. A continuación el Vallequín, Campastiñosas, Celleros y el Cueto Millaró o Brañacaballo, cota máxima de la zona con sus 2188 m. Hacia el Suroeste, varias de las cumbres del Valle de Arbás, y Pajares. Al Oeste, el macizo de Peña Ubiña y todo su abrupto cordal, Peña Rueda, Cirbanal, etc. etc. En el valle al Sur vimos parte de Tonín, único pueblo que se acertaba a distinguir desde allí.

Aunque se habían abierto algunos claros, el viento soplaba fuerte y la temperatura era fresca, así que nosotros nos acomodamos un poco hacia el Norte para comer mientras la otra pareja iniciaba el descenso. En la cima puede verse una Cruz de la Victoria metálica con un buzón en su base y un mástil con otro buzón a su lado. Encima de éste tiene la figura de dos montañeros.

Tras algunas fotos en la cima y dejar nuestra tarjeta de cumbres, iniciamos el descenso a las 17:00 horas. Bajamos por el mismo sendero hacia el collado siguiente, el de Estrella de Cuanya, 2043 m, al que llegamos en pocos minutos. La intención iniciar era rodear el Cueto los Barriales hacia el collado del Cuadro para subir el pico del mismo nombre desde él, pero viendo tan accesible esta cumbre siguiente, iniciamos la subida por la cómoda loma.

A las 17:17 horas alcanzamos la cima del Cueto los Barriales con sus 2019 metros y habiendo caminado un total de 7,900 km. Unas fotos en el mismo, tarjeta entre un hito de rocas y nos encaminamos hacia el cercano Robequeras. Una suave loma casi toda de bajada y de unos 230 metros de longitud nos llevó a esta cima con una altitud de 2091 metros. En aquella ocasión de 2011, y como ya anoté, tomamos estas dos cimas como una sola. De nuevo una tarjeta entre piedras, cuatro fotos, estas haciendo un poco “el tonto”, y nos echamos a la ladera para rodear la cima anterior hacia el collado del Cuadro. Si se sigue la cresta desde el Robequeras hacia el Oeste se llega al Pisones o Camparón y luego al Tres Concejos. Estos ya cierran el valle paralelo al de Tonín y que baja a Pendilla.

Lucia el sol cuando cruzamos hacia este siguiente collado de 2015 m al que llegamos en pocos minutos. Desde el mismo se inicia la subida al pico del mismo nombre, Cuadro. Ahora teníamos justo de frente bajo nosotros la gran brecha que forma el arroyo del Valle del Cuadro al lado de la cual habíamos pasado anteriormente. La falda campera la remontamos cómodamente hasta alcanzar la cresta rocosa por la que coronamos la cima a las 18:20 horas y tras 9,400 km. El pico Cuadro tiene 2089 metros de altitud y se sitúa en la loma divisoria entre los valles de Tonín y Pendilla. La primera vez que ascendimos a estas cumbres lo hicimos desde este segundo pueblo. El sol ya al atardecer lucía claro en esos momentos dando un tono más amarillento al paisaje. Fotos y una nueva tarjeta de cumbres entre un monolito de rocas antes de retomar la marcha por la misma sierra hacia el Suroeste y la última cima de las principales. Bajamos por la cresta suavemente antes de remontar un pequeño tramo a la cima del Cuérravo y los 2023 metros de su cota. 10,200 km llevábamos hasta esa última cima de la jornada a la que llegamos cuando eran las 18:53 horas. En ella otro monolito de piedras, pero esta vez con una placa con el nombre, altitud, fecha y suponemos que nombre del grupo que la puso. Unas fotos más y nueva tarjeta de cumbres entre el hito de rocas antes de iniciar ya el regreso a Tonín. Por el Oeste, sobre las Ubiñas, negros nubarrones, acentuados además por el contraluz, se acercaban hacia nosotros. Durante algunos ratos crearon bellas postales con tonos anaranjados en las nubes.

Nos quedaba un buen tramo por la cresta hasta el collado desde el cual íbamos a descender. Estábamos siguiendo el track del GPS pero en sentido inverso, ya que el que lo publicó había hecho la ruta al contrario, subiendo primero estas cimas. Bajamos por la suave loma y fue en este siguiente tramo cuando vimos Pendilla bajo nosotros en el valle de la derecha. En esta cresta se trazan algunos suaves altibajos cuando se pasa por las cimas de Las Corralinas y El Pago, ambas no tan relevantes como para considerarlas cumbres “ascendidas”. El sendero está bastante marcado, aunque en este trayecto se pierde un poco en algunas zonas de escobas tupidas con las que a veces hay que pelear. No son tramos muy largos y bajando se hace más fácil que subiendo. Iba anocheciendo y no estábamos muy seguros de cómo estaría la bajada desde el collado, aunque habíamos visto un camino que descendía desde el mismo y que venía del pico Cueto Restiello, el siguiente de la sierra.

A las 20:00 horas llegamos a este collado de Sierra Bermejo con 1728 metros de altitud. Llevábamos 12,400 km. Encontramos un sendero algo ancho y nos echamos por él, aunque enseguida vimos que se cerraba. Comprobamos que el camino estaba un poco más a la derecha y cruzamos entre algunas escobas para salir enseguida al mismo. Era ancho y se veían rodadas de vehículos, lo cual daba seguridad. La noche se echaba encima a pasos agigantados y cada vez se veía menos. Además, los nubarrones ya estaban encima de nosotros oscureciendo aún más el paisaje. Cruzamos el pequeño arroyo Calear y minutos después, a las 20:30 horas, cerramos el lazo cerca del estrecho puente de madera sobre el arroyo del Cuadro. En él nos sacamos unas fotos e hicimos una breve parada. Aprovechamos para colocarnos los frontales ya que era noche cerrada.

Habíamos decidido hacer el resto del trayecto por el ancho camino, al lado del cual seguíamos encontrando algunas vacas, terneros y caballos entre los matorrales y escobas. Subimos un pequeño tramo desviándonos un poco hacia una vaguada lateral antes llegar a otra pasarela similar a la anterior sobre el arroyo Aguazones de Tonín. La cruzamos para descender y colocarnos de nuevo paralelos al principal. Con la luz de los frontales íbamos viendo unos reflejos en el suelo, y como ya sospechábamos de algunas rutas nocturnas, eran los ojos de pequeñas arañas que se escabullían al acercarnos. Con el flash de la cámara pude sacar alguna foto a los servales del cazador y sus frutos rojos destacando.

Llegamos así a la nave ganadera que por la mañana habíamos visto desde la otra orilla. La dejamos a un lado y seguimos bajando un pequeño tramo más antes de llegar al punto en el que en la subida nos habíamos desviado a esa otra margen del río. Pasamos otra cancilla y ya con las luces de Tonín a la vista vimos como se echaba a llover. Por suerte no fue ni mucho rato ni muy fuerte y así entramos en el pueblo a las 21:35 horas. En el recinto de entrada de una vivienda vimos tres bonitos cachorros de perro con la madre, que salió corriendo al acercarnos. Nos encontramos con tres vecinos del pueblo más adelante y estuvimos conversando con ellos unos minutos. Traían también un par de perros acompañándoles, uno de ellos el padre de los cachorros.

A las 21:50 horas finalizamos la ruta al lado de la iglesia donde teníamos la furgoneta. 18,000 km y un desnivel acumulado de 1141 metros eran los datos principales que nos daba el GPS. Nos cambiamos allí mismo, donde también había una fuente, y a las 22:05 horas iniciamos el regreso a León. Sin novedades hicimos el trayecto a la capital y a las 23:00 horas dejaba a Mª Jesús en casa. 14º C marcaba un termómetro a esa hora. Escasos cinco minutos después llegaba yo a la mía.

Buena ruta la de este sábado otoñal con varias cumbres ascendidas desde la cuales pudimos disfrutar de una espectaculares vistas, que es el objetivo principal. Nos encaminamos hacia el final del año y del invierno para seguir deleitándonos con los diferentes paisajes y sus cambios estaciónales.

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