sábado, 12 de febrero de 2022

VIZBUENO Y TORRES DE VIZBUENO (Colinas del Campo) - 05-02-2022

1ª ASCENSIÓN AL “VIZBUENO” Y A LAS “TORRES DE VIZBUENO”.

6ª TRAVESÍA AL “CAMPO DE SANTIAGO”.

(Colinas del Campo de Martín Moro Toledano). 

05-02-22                         (Sábado)


Hemos realizado un cambio total de la pasada ruta a ésta. En esta ocasión nos hemos ido al Bierzo, a una zona prácticamente libre de nieve, para ascender a las cumbres de la sierra del Vizbueno, en Colinas del Campo de Martín Moro Toledano. Desde dicho pueblo recorrimos tres de los valles cercanos alcanzando, como digo, algunas de las cimas de esta sierra centrada entre los mismos. Nos animamos a participar 8 personas: Juan, José Luis, Silvano, Mª Jesús, Alex H., Tiquio, José Carlos y yo.
Sobre las 8:10 horas salí de casa para recoger seguidamente a Mª Jesús, José Luis y a Tiquio. Por su parte, Silvano recogía a Juan y a Alex. En La Virgen del Camino nos reunimos todos retomando la marcha a las 8:50 horas por la nacional hacia Astorga. Mientras amanecía avanzamos por la misma y ya cerca de esta localidad enlazamos con la autovía. En el alto del Manzanal se nos cerró la niebla y allí paramos unos minutos a tomar un café en una cafetería. Iniciamos luego el descenso del puerto hasta desviarnos hacia Folgoso de la Ribera. Por estrechas carreteras, y mientras la niebla se disipaba, nos fuimos acercando al punto de inicio de la ruta en Colinas del Campo. A éste llegamos cuando eran las 10:20 horas y tras 110 km.
Al inicio del pueblo hay un aparcamiento en el que ya estaba José Carlos esperando. Allí nos preparamos para la marcha y nos hicimos una foto de grupo con el cartel del nombre del pueblo de fondo. A una altitud de 1065 metros iniciamos la caminata a las 10:40 horas por la carretera que entra hacia el pueblo y que enseguida se convierte en firme adoquinado de piedra. Las nieblas apenas ocultaban ya el paisaje y el sol ganaba terreno. La calle principal pasa bajo un arco de la ermita del Santo Cristo antes de llegar a un puente sobre el río Boeza o Del Campo por el que ahora cruzamos a la margen contraria. En principio la ruta era circular, subiendo por el valle de Susano y bajando por el Campo de Santiago y el valle de Boeza. El bonito pueblo de Colinas lo forman innumerables edificaciones de piedra y pizarra, muchas de ellas de bella estética tradicional. Ya saliendo del mismo por el camino que se dirige hacia el valle del río Susano, pueden verse algunos molinos a la vera del mismo muy bien restaurados así como un bonito potro de herrar ganado.
El sol aparecía ahora por encima de las lomas del Este creando unas impresionantes y bonitas postales con los rayos entre la niebla y la arboleda. El camino subía suavemente con dirección Nordeste paralelo al cauce del Boeza por nuestra derecha mientras por la izquierda teníamos las praderías y la laderas de la sierra que lo cerraba por esa parte. Dejamos atrás la Fuente El Moral, un bonito manantial acondicionado con piedra y un banco del mismo material a su vera.
Poco a poco fuimos cambiando rumbo a Noroeste mientras la pendiente se hacía más pronunciada y nos metíamos al valle del río Susano, que allí mismo, por debajo del camino, se une al Boeza. El firme se hizo mas pedregoso en este estrecho valle bajando también el cauce por nuestra derecha. Por delante ya aparecieron varias cumbres que lo rodean, aunque las principales quedaban ocultas de momento. Hace casi cinco años subimos y bajamos por aquí también en una ruta al Catoute y la Cernella.
El día había abierto por completo y ya se notaba incluso el calor del sol, que desde hace varias semanas mantiene las temperaturas en un nivel anormalmente alto para la época invernal en la que estamos, a lo cual unimos la falta de precipitaciones. Hubo que irse despojando de ropa de abrigo mientras ganábamos altura y volvíamos a cambiar el rumbo a Norte por el camino que se mantenía ancho y despejado. Varios pedregales se precipitaban desde las laderas laterales. En las márgenes del camino encontramos algunos acebos que destacaban por el verdor de sus hojas. Llegamos entonces al desvío de la vaguada que sube hacia el Catoute y en la que unas señales de madera del “PR LE 45” indicaban la dirección a Colinas, 3 Km, y por otro a las Lagunas de La Robeza. En el GPS me marcaba 3,800 hechos y una altitud de 1377 m. Eran las 12:00 h del mediodía.
Poco más adelante cruzamos el río saltando por las piedras hacia margen contraria y fue por allí donde Tiquio decidió quedarse mientras el resto seguimos subiendo ahora por las praderías. Echando entonces la vista atrás vimos un refugio pocos metros por encima de donde estaba el desvío al Catoute y se lo indicamos a Tiquio para que subiese a él si quería. Por las praderías que nosotros cruzábamos bajaban varios regatos que abnegaban buena parte de las mismas. Enlazamos enseguida con un sendero más marcado y que se introdujo entre algo de maleza. Cruzamos un cercado de piedras y en el río vimos algunos pequeños saltos de agua. Cerca de uno de ellos atravesamos el cauce por un estrecho trozo de viga de cemento a modo de puente en el que estuvimos haciendo algunas fotos.
La senda seguía subiendo tras este paso mientras el valle se estrechaba algo más y el río se encajonaba varios metros ya por debajo en angostos desfiladeros bajo las verticales paredes del pico Cernella. Dejando atrás este cañón se volvió a abrir el valle ya hacia su cabecera. El río se convertía allí en numerosos arroyos afluentes en su nacimiento. En ellos vimos una bonita vegetación de un color verde espectacular.
En el GPS llevábamos dos rutas, una de ellas llegaba a la laguna de la Rebeza mientras que la otra se echaba a las cumbres directamente. La laguna se encuentra en la cabecera del valle siguiendo la vaguada del Oeste, entre el pico la Cernella y el pico de la Rebeza. La idea era llegar a ella para luego volver hacia el Este donde se encuentran las cimas a las que nos dirigíamos. Pues bien, por mi parte y alguno más, y viendo que hasta ella había que subir unos 100 metros para luego tener que volver, como digo, decidimos olvidarnos de la misma y dirigirnos directamente hacia el Vizbueno. Allí estábamos a 1780 metros y eran las 13:30 horas. Habíamos hecho 6,200 km.
Juan, José Carlos y yo iniciamos la subida por la loma Este siguiendo un sendero mientras los demás lo hacían hacia la laguna por la vaguada contraria. Fue en ese momento cuando vimos bajar por un pedrero bajo la Cernella a un grupo de rebecos, o similar. A esa altitud comenzaban a verse algunos pequeños neveros aislados y algo más abundantes en las cimas. Fuimos ganado altura cómodamente por la ladera herbosa entre algo de vegetación baja hasta alcanzar la cresta a las 13:48 horas a una altura de 1846 m. Desde la misma divisamos parte del Campo de Santiago al Noroeste con la Choza del Campo en ella, un edificio abandonado por el que más tarde pasaríamos en la bajada. En la parte Este de este valle se veía la collada de Ocidiello o de Campo, que comunica Fasgar y dicha campa.
La pendiente se acentuó desde allí y pisamos la primera nieve de la escasa que quedaba, como anteriormente anoté. José Carlos se había adelantado y quedamos Juan y yo algo por detrás. Nos metimos en un gran pedrero en el que había que vigilar las rocas algo heladas y resbaladizas en las que el hielo formaba unas bonitas figuras estrelladas. No tardando, y echando la vista atrás, emergieron las cimas de la parte Oeste de la sierra, el Catoute y la Cernella y la Rebeza. También al Norte la nevada cima de Peña Ubiña y parte del macizo que la integra.
Ya bastante arriba, en una pequeña cima anterior, encontramos un pequeño abrigo de rocas desde el cual se descendía unos pocos metros a un collado. Ya veíamos la cumbre principal del Vizbueno y la primera de las Torres de Vizbueno. La loma era montana y cómoda de subir desde dicho collado. Al Norte, las paredes de la sierra eran muy pedregosas y bastante verticales desde el pico. Más suaves se veían desde dicho collado, desde el cual, ya adelanto, iniciamos más tarde el descenso al Campo de Santiago.
Pocos minutos nos llevó a Juan y a mí llegar a la cumbre del Vizbueno en la que ya estaba José Carlos y que nosotros alcanzamos cuando eran las 14:40 horas. Esta cumbre, con dos cimas cercanas, tienen una altitud similar de 1996 metros y hasta la misma habíamos recorrido 8,400 km. Al resto de compañeros los veíamos aún bastante atrás tras haber llegado a la laguna. José Carlos y yo decidimos entonces acercarnos hasta las Torres de Vizbueno, las otras cumbres de la sierra situadas más al Este y con escasos desniveles hasta ellas. Por la cresta iniciamos un descenso al collado siguiente de 1959 metros para remontar luego la loma hacia dichas cimas. En una intermedia encontramos dos grandes monolitos de rocas apiladas que dejamos atrás para seguir subiendo hacia las siguientes.
Las Torres de Vizbueno la componen tres o cuatro cimas cercanas, de las cuales la principal tiene 1986 metros de altitud. Desde el Vizbueno habíamos caminado unos 900 metros siendo ahora las 15:00 horas. Justo bajo las mismas, al Norte, se emplaza la ermita de Santiago. Por el Este se veía el cresteo muy abrupto y vertical que baja hasta valle del Boeza a la altura del lugar conocido como El Brañueto. De hecho, uno de los track que llevábamos tenía la subida por dicho lugar, descartándolo por tener una calificación de muy complicado en varias de las reseñas consultadas. Al Sur contemplamos ahora perfectamente el pueblo de Colinas del Campo. Por el Este, al otro lado del valle, corría la sierra en la que se emplazan cumbres como el Sesteadero Buey de Fraile, Arcos de Agua o el Miromalo. Tras el Campo de Santiago destacaba el Tambarón y sus monolitos de piedras similares a los encontrados anteriormente. En la lejanía, numerosas cumbres de Babia y Omaña, así como la inconfundible Peña Ubiña. Un poco al Norte del pico Rebeza, y algo más alejado, el Valdeiglesias, una de las primeras opciones que se habían puesto para esta jornada.
Nos sacamos unas fotos José Carlos y yo y dejamos una tarjeta en un bote entre un hito de rocas antes de emprender el regreso al Vizbueno donde ya veíamos al resto de compañeros que habían ido llegando. Al poco de comenzar a bajar nos cruzamos con Mª Jesús, que subía hacia esa cima. En poco más de 15 minutos, cuando eran las 15:40 horas, llegamos nosotros al Vizbueno donde sin más retrasos nos acomodamos para comer. Algunos nubarrones ocultaban el sol a ratos por el Suroeste y una brisa fresca nos hizo abrigar mientras comíamos. De nuevo todos juntos nos sacamos unas fotos de grupo e igualmente dejamos una tarjeta de cumbres en la cima.
A las 16:45 horas iniciamos el descenso siguiendo la misma cresta de subida hasta el primer collado. Mi idea era llegar al segundo, en la cabecera del Campo de Santiago, pero al final, viendo que la vaguada que descendía por allí no parecía tener dificultad, nos echamos por ella directamente. La pendiente era pronunciada entre matojos bajos, pedreros y algunos neveros helados, en los que alguno pegó el patinazo. Por debajo se veía arboleda y no sabíamos cómo estaría de tupida. Mientras algunos continuaron por el mismo centro de la vaguada, otros nos fuimos desviando hacia la derecha buscando las zonas más limpias de arboleda y escobas, que eran cada vez más altas. Como mejor pudimos, fuimos sorteando las mismas sin mayor dificultad siguiendo en ocasiones lo que parecían senderos de animales.
Eran las 18:00 horas cuando llegamos a la parte baja del Valle, en el Campo de Santiago, a la altura del caserón abandonado que hay en el mismo y que en el mapa lo marca como la Choza del Campo. Pasamos a su vera camino de la ermita, más al Este, cruzando por la pradería y encontrándonos enseguida con los innumerables regatos que surcan esta gran vega en la que nace el río Boeza. Algunos eran fáciles de cruzar saltando, pero otros eran tan anchos que había que buscar el lugar adecuado para ello. El agua estaba cubierta en su mayoría por una capa de vegetales de un verde intenso y en muchos lugares vimos restos de hielo.
A las 18:15 horas nos situamos a la vera de la Ermita de Santiago, en la que cada 25 de Julio se realiza una romería coincidiendo con la celebración del patrono de España. Hace ya 23 años, en 1999, hicimos una ruta nocturna desde Colinas la noche del 24 al 25, encontrándonos a la llegada con innumerable personal acampado allí y de fiesta. Acampamos nosotros también y por la mañana, como digo, subió mucha mas gente desde Fasgar, andando o en vehículos, y antes de la misa procesionaron la imagen de Santiago y de la Virgen alrededor de la ermita.
Estábamos a una altitud de 1483 m y llevábamos recorridos hasta allí 13,300 km. Quedábamos por detrás Alex, Mª Jesús, José Carlos y yo, mientras el resto, que habían bajado por la vaguada directamente, estaban ya algo por delante. Apenas paramos allí antes de seguir, subiendo ahora ligeramente hacia el collado que da paso al valle que baja a Colinas del Campo. No tardamos en encontrar grandes corros de duro hielo cubriendo el ancho camino y que tuvimos que ir sorteando para evitar peligrosas caídas. Al poco de iniciar el descenso vimos una gran losa labrada por ambos lados en la que se indicaba que estábamos recorriendo una parte del Camino Olvidado a Santiago, variante de la Ruta Jacobea que recorre el Norte. Parecía haber sido colocada recientemente.
Íbamos rodeando ahora las Torres de Vizbueno por su cara Nordeste donde se veían las escarpadas paredes de la misma. Bajo ellas, al otro lado del río Boeza o Campo, vimos una pequeña edificación de piedra y pizarra, comprobando más adelante que se trata de una ermita al encontrar un indicador que marcaba la dirección a la misma. El camino se fue metiendo entre algo de arboleda y más adelante dejamos atrás una fuente con un cartel de madera del que se había borrado el nombre. Nos situamos entonces a la vera del río y no tardamos en llegar al primer puente sobre el mismo por el que cruzamos. Nos metimos en una zona rocosa en la que estaba escavada la senda que volvía a coger altura sobre el cauce. Una nueva señal nos indicaba la situación de la cascada del Brañueto hacia el río. En ese punto se iniciaba la subida a las Torres de Vizbueno por el escarpado espolón Este de las mismas siguiendo otro de los tracks del GPS.
No mucho después descendimos de nuevo para cruzar el río por un par de puentes de madera enlazados y formando un pequeño ángulo. Paralelo a ellos se veía otro mucho más antiguo y medio destrozado por el que alguna vez pasamos en las primeras veces que hice la ruta por este valle. Seguimos encontrando fuentes y manantiales a la vera del camino, en el que también continuaban apareciendo grandes corros helados. Algunas de las fuentes ya eran elaboradas con piedras y pizarra. El verde musgo y la vegetación que las rodeaba les daba un toque de postal en las fotos, ya con flash, que fui sacando. Hubo que sacar los frontales al caer la noche por completo, más que nada para evitar esos traicioneros cercos congelados.
A las 20:25 horas vimos las primeras luces del pueblo y cinco minutos después entramos en él entre sus casas de piedra y las calles adoquinadas. Volvimos a pasar bajo el arco de la ermita del Santo Cristo y a las 20:40 horas terminaba yo la ruta en el aparcamiento. Allí ya estaban algunos compañeros mientras los últimos quedaban por detrás. El GPS nos daba como datos principales: 20,800 km hechos con un desnivel acumulado de 1147 m.
Nos cambiamos y nos acercamos al bar del pueblo a tomar un merecido refrigerio. Ya eran las 21:30 horas cuando iniciamos el regreso a León llegando en una hora y media. Dejé a los compañeros que venían conmigo y a las 23:30 horas terminaba yo el viaje en casa mientras el termómetro exterior marcaba -2º C.
Nueva ruta añadida al largo listado de ellas y nueva jornada disfrutada al máximo con una climatología más acorde de la primavera que de este invierno tan irregular. Bonitos paisajes con valles, cumbres y la bella arquitectura del pueblo. Para recordar positivamente.

MAPA ESQUEMA

ENLACE RUTA WIKILOC:


VISTA SATÉLITE

ARMUNIA

LA VIRGEN DEL CAMINO

TRAYECTO

"ARCOIRIS" BLANCO




INICIO DE RUTA (1065 m)


ERMITA DEL SANTO CRISTO


LA NIEBLA SE VA DISIPANDO


RÍO BOEZA



MOLINOS



POTRO DE HERRAJE

BELLOS CONTRALUCES



FUENTE EL MORAL


ENTRANDO AL VALLE DE SUSANO







DESVÍO AL CATOUTE

HACIA LA CABECERA DEL VALLE DE SUSANO






EL RÍO SE ENCAJONA BAJO LA CERNELLA

CABECERA DEL VALLE


POR LA LOMA DEL VIZBUENO

CAMPO DE SANTIAGO



ABRIGO DE ROCAS EN LA ANTECIMA


EL CATOUTE CORONADO POR NUBES


LAS PAREDES DEL VIZBUENO AL NORTE

DESDE EL VIZBUENO (1996 m)


MONOLITOS DE ROCA ENTRE CIMAS

EL CAMPO DE SANTIGO DESDE LAS TORRES DE VIZBUENO (1986 m)


COLINAS DEL CAMPO AL SUR

TORRES DE VIZBUENO



EN EL VIZBUENO




MACIZO DE PEÑA UBIÑA

DESCENSO AL COLLADO

BAJADA POR LA PENDIENTE VAGUADA


CAMPO DE SANTIAGO




CHOZA DEL CAMPO


ERMITA DE SANTIAGO

MEANDROS EN EL VALLE - NACIMIENTO DEL BOEZA







ERMITA DE SANTIAGO



CAMINO CONGELADO

MONOLITO DEL CAMINO OLVIDADO EN EL VALLE DEL BOEZA

ATARDECER


LA LUNA CRECIENTE


FUENTE

RÍO BOEZA Y PUENTES SOBRE EL MISMO








FUENTES Y MANANTIALES




ENTRANDO EN COLINAS


POR SUS BONITAS CALLES





ERMITA DEL SANTO CRISTO


ARMUNIA

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