jueves, 9 de diciembre de 2021

LOS CAMINOS DE LA TRASHUMANCIA - (Villayuste) 04-12-21


1ª TRAVESÍA “VILLAYUSTE – BRAÑA DE LA URZ - CAMPAR DE LA ERMITA –

 LA MATONA – LAGO DE OMAÑA – VILLAYUSTE. (VARIANTE RUTA

 CAMINOS DE LA TRASHUMANCIA)”.

04-11-21                   (Sábado)

Todavía hubo tiempo para una penúltima ruta antes de rematar el año montañero con el Belén de Cumbres, que esperamos hacer en las próximas semanas. Elegí esta sencilla ruta en Villayuste señalizada por “Cuatro Valles” y denominada “Los Caminos de la Trashumancia” y que hace varios años hice, también modificada por algunos errores cometidos. En esta ocasión la hemos alargado a propósito dado que nos encontramos con mucha menos nieve de la esperada tras la caída en días anteriores y la tregua que nos daba el temporal.
Seis participantes: José Luis, Álvaro, Mª Jesús, Juan, Silvano y yo, nos animamos en esta ocasión repartidos en mi furgoneta y el coche de José Luis para salir del lugar habitual a las 8:50 horas, con unos 5º C en los termómetros y el cielo cubierto. Por la carretera de La Magdalena avanzamos hacia esta población para detenernos poco después en Canales a tomar un café. Las nieblas de los valles se iban disipando mientras las cumbres nevadas permanecían algo ocultas. De nuevo en marcha fue apareciendo el sol y así llegamos a Villayuste, encontrándonos con el pueblo libre de nieve salvo algunos pequeños neveros aislados.
A las 10:00 horas aparcamos en esta localidad de Omaña emplazada a 1153 metros de altitud y nos preparamos para la ruta. No lejos vimos algunos pequeños gatos entre las tapias de una huerta. También varios perros en las calles. La ruta salía del pueblo por el Barrio Chico, situado algo más abajo, pero decidimos evitar esa pérdida de altitud atajando por otros caminos y sendas al Este entre algunos prados y pequeñas lomas. Dejamos atrás un lavadero de reciente construcción, por lo que se advertía, e iniciamos una subida por el camino sorteando algunos de los escasos neveros que quedaban. Como apunte, anoto que ese día estrenaba polainas tras deshacerme de las anteriores totalmente destrozadas ya.
Poco a poco se fue ampliando el paisaje al Oeste y emergieron algunas cumbres hacia esa orientación como La Campona o el Suspirón entre otras. Ahora teníamos otra vista del pueblo ya algo más abajo. Abandonamos el camino para atajar un tramo campo a través antes de enlazar con la ruta oficial en lo alto de la loma y tras haber caminado algo más de 800 metros. Cambiamos entonces de rumbo para dirigirnos al Norte por ese ancho camino en el que ya encontramos algunos reductos de bosque de robles. La nieve cubría algo más el terreno en los lugares más umbríos. Nos cruzamos luego con otro camino en el que vimos una señal del “Camino Olvidado”, una de las variantes del Camino de Santiago, y que antaño hemos visto en algunos pueblos de esa zona. Poco más adelante encontramos un cartel medio destrozado con información sobre la trashumancia. En ese punto nos incorporamos al Cordel de las Merinas, otra ruta también señalizada por Cuatro Valles en un tramo más al Norte, desde Abelgas. A la par, y coincidiendo con este tramo, transcurre la ruta ciclista de las Cuencas Mineras de Castilla y León en la etapa “Vega de Caballeros – Riello”.
Además de la nieve fuimos encontrando grandes charcos de agua y tramos embarrados y en algunos puntos estaba totalmente congelado el terreno. El día se mantenía despejado y no demasiado frío. El robledal se hizo más tupido y el ancho camino lo cruzaba dirección Sur a Norte. Íbamos ganando altura muy suavemente y así llegamos a un punto desde el que divisamos las cumbres al Noroeste. En un cruce allí mismo una señal múltiple nos marcaba: 3,500 km a Irede de Luna, 7,000 km a Los Barrios de Luna, 5,100 km al Campar de la Ermita, 13,000 km a Abelgas y 17,300 km a Sena de Luna.
Fue allí cuando decidimos que podíamos acercarnos hasta el Campar de la Ermita, refugio que yo tenía marcado en el GPS, aunque en ese momento no sabía de qué ruta exactamente. Seguimos ascendiendo por el camino que poco a poco fue girando a Oeste y en el que cada vez había más nieve. En ella vimos huellas de algunos animales, algunas podía ser de lobo. Yo había llevado las raquetas, pero las dejé en la furgoneta al ver la escasa nieve que había. En algunos tramos de esta parte alta sí hubiesen sido útiles, aunque igual no tanto para compensar ir cargando con ellas.
A las 13:05 horas llegamos al punto en el que la ruta daba un giro para regresar a Villayuste y que en el mapa señala como Braña de la Urz. Estábamos a 1443 metros de altitud y llevábamos 6,900 km. Como ya habíamos decidido, seguimos para adelante por el mismo camino y comenzamos a subir la loma de La Matona, pequeña cumbre rodeada de más robles que ahora dejamos unos metros por encima al Norte sin desviarnos a la misma. Alcanzamos en ese punto una altitud de 1510 metros y nos sacamos una foto de grupo antes de iniciar el descenso hacia el siguiente collado, anterior a la Cinta del Cueto, otra cumbre tras la cual ya estaba el refugio.
Por el Oeste comenzaban a aparecer algunos nubarrones que de momento se mantenían alejados. Descendimos entre el bosque de robles deshojados y con el camino totalmente cargado de nieve hasta llegar a este segundo collado de 1458 metros. Allí los árboles desaparecían durante un tramo antes de volver a las márgenes del camino en la subida a la Cinta del Cueto. Seguíamos por el Cordel de las Merinas que rodeaba esta cima por el Norte hasta alcanzar la cota más alta de la ruta a 1568 metros desde la cual ya se iniciaba el descenso al último collado cerca del cual se emplazaba el refugio, que seguía sin ubicar en una ruta anterior. Bajando al mismo vimos de nuevo una señal de la ruta ciclista.
Ya cerca del mismo, y viendo además el corral de ganado cubierto a su vera, caí en la cuenta de cuando había estado allí. En la ruta del pasado febrero cuando hicimos la Sierra de la Filera, que teníamos justo encima al Noroeste, bajamos por allí de nuevo a Curueña. A las 14:25 horas, y tras 10,500 km, llegábamos a dicho refugio de piedra emplazado a 1485 metros de altitud y en el que hay una mesa, bancos y chimenea. Unos fuera y otros dentro nos acomodamos para comer cómodamente mientras seguía luciendo el sol, aunque eran cada vez más abundantes los nubarrones por el Oeste. Nos sacamos una foto de grupo en el exterior y a las 15:35 horas iniciamos el regreso. Teníamos que volver a desandar lo anterior hasta el enlace con la ruta de los Caminos de las Trashumancia, por lo que había que volver a subir las lomas de las cimas de nuevo. No había atajo posible ya que entre medias había dos valles por los que no sabíamos si transcurría o no algún camino o sendero, que además con la nieve podían estar intransitables. Tampoco bajar a La Urz, con el mismo problema, y no era plan de volver por la carretera luego, con el rodeo que además se daba.
Volvimos a remontar la loma bajo la cima de la Cinta del Cueto hasta la cota alta antes de emprender la bajada al collado posterior. Las nubes iban ganando terreno por el Oeste y no tardaron en escaparse gotas de agua - nieve. En las partes altas el viento corría bastante fresco, o más bien frío, y hubo que abrigarse un poco más. Echando la vista atrás vimos como apenas se veía ya la sierra de la Filera. Mientras el resto se adelantaba, por detrás fuimos quedando Mª Jesús y yo. Al llegar a la altura de La Matona decidimos desviarnos unos pocos metros hasta su cima en la que encontramos un vértice geodésico. Esta cima, que no he considerado como tal en el cómputo de ascensiones, tiene una altitud de 1514 metros y desde ella pueden verse numerosas cumbres más al Nordeste como el Cerro Pedroso, los Montes Tijera, Lamazo, Vega Cercada, etc, etc. En esos momentos pudimos disfrutar de un hermoso arco iris muy definido en esa orientación que he conseguido captar con la cámara y hacer luego unas panorámicas completas del mismo.
Bajamos de ésta y ya en el camino de nuevo llegamos al punto en el que una señal, medio rota también, marcaba distancias (ilegibles) de la ruta de Cuatro Valles. Eran las 17:00 horas, estábamos a 1442 metros de altitud y llevábamos 14,400 km hechos. Nos echamos al camino que descendía al Sur y en el que no vimos las huellas de los demás compañeros. Por teléfono supimos que se habían ido algo más adelante por la cresta y que habían atajado luego al mismo. De hecho no tardamos en ver sus huellas en el punto donde se habían incorporado al camino.
La nieve iba desapareciendo a la vez que perdíamos altura, pero encontramos hielo en las rodadas que había en el camino. El sol se ocultó por el Oeste, por donde seguían apareciendo nubarrones. La cumbres de la Filera ya no se veían con la niebla y ya casi tapaba la de la Cinta del Cueto. Los robles seguían escoltando el camino que transcurría entre dos valles, el del arroyo de la Barcena al Este y el de Carrocedo al Oeste. A las 17:45 horas llegamos a otro pequeño refugio de ladrillo y cemento en el que encontramos varias sillas, mesas, algunos muebles y utensilios de cocina. Había tenido chimenea, pero ahora le faltaba. No lejos vimos una fuente con pilón. Del resto de compañeros no sabíamos nada, aunque por lógica tenían que ir por delante.
El cielo se teñía de los colores vespertinos y la noche ganaba terreno. Al final el temporal se había mantenido alejado por todo el Oeste donde seguíamos viendo oscuras nubes. No tardamos en ver las luces de Villayuste al Este, no lejanas, pero la ruta seguía un trayecto más largo pasando muy cerca de Lago de Omaña, que pronto divisamos también más al Sur. A las 18:35 horas, habiendo hecho ya 20,400 km, llegamos a las inmediaciones de este pueblo situado a 1128 metros de altitud y al que la ruta no llega a entrar, pasando a escasos 200 metros de las primeras casas. Una señal nos marcaba 3,000 km a Villayuste desde ese punto donde dimos un brusco giro de casi 180 grados para encaminarnos ya hacia el mismo. Pasamos al lado de una gran laguna y abrevadero mientras avanzamos por el camino ancho que seguía descendiendo hacia el fondo del valle del arroyo de la Barcena. Por delante llegamos a ver ahora las luces de los compañeros ya no lejos del pueblo. Al llegar nosotros al arroyo nos encontramos con un puente de hormigón con barandilla de troncos que desembocaba frente a un murete de piedras de una finca. Ya no se veía apenas y saltamos el mismo por un hueco medio caído hacia un prado saliendo al camino poco después. Luego vimos que entre este murete y el río iba un sendero.
Desde ese punto, el más bajo de toda la ruta a 1071 metros de altitud, iniciamos la subida final al pueblo ya con los frontales puestos. A las 19:20 horas entramos Mª Jesús y yo en Villayuste por la parte contraria a la de salida. Cinco minutos después finalizábamos la ruta en la plaza donde ya estaban los compañeros esperando. El GPS nos daba como datos principales, 23,000 km hechos y un desnivel acumulado de 763 m, lo cual no es nada desdeñable para una travesía.
Nos cambiamos y a las 19:50 horas iniciamos el regreso a León. Pues bien, nos costó un rato salir del pueblo. Cada calle que cogíamos, o salía hacia caminos o nos daba la vuelta al mismo sitio. Por fin salimos a la carretera por la que avanzamos sin novedades hasta llegar de nuevo a Canales donde volvimos a parar a tomar un café en el mismo lugar de la mañana. Media hora después llegamos a León donde quedaron algunos compañeros y minutos después dejé a Mª Jesús. A las 21:20 horas, con 4º C de temperatura en la calle, llegaba yo a casa. Bonita travesía la de este primer sábado de diciembre, que modificamos sobre la marcha y que resultó al final una ruta más que estimable ya a punto de finalizar el año montañero.           


MAPA ESQUEMA

ENLACE RUTA WIKILOC:


MAPA SATÉLITE

ARMUNIA

TRAYECTO





VILLAYUSTE




INICIO DE RUTA (1153 m)




ATAJANDO POR LAS PRADERAS Y PANORÁMICA DEL PUEBLO





YA EN LA RUTA



SEÑAL DEL CAMINO OLVIDADO


ROBLEDALES





PANORÁMICA AL SUR

CUMBRES AL NORDESTE

POR EL CORDEL DE LAS MERINAS



LA MATONA



FRENTE A NOSOTROS LA CINTA DEL CUETO Y DETRÁS LA FILERA


PASANDO POR EL COLLADO

RODEANDO LA CINTA DEL CUETO





DESCENSO AL REFUGIO Y SIERRA DE LA FILERA DETRÁS

REFUGIO CAMPAR DE LA ERMITA (1485 m)






DE REGRESO

NUBARRONES AL OESTE




CUMBRES HACIA LUNA







BONITO ARCO IRIS DESDE LA MATONA (1514 m)





BAJANDO HACIA LAGO DE OMAÑA





PEQUEÑO REFUGIO EN EL DESCENSO

DIVISAMOS VILLAYUSTE

ANOCHECE


SEÑALES EN LAGO DE OMAÑA

PUENTE SOBRE EL ARROYO DE LA BARCENA



ENTRANDO EN VILLAYUSTE


FIN DE RUTA

CANALES

ARMUNIA

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