EL BLOG DE JAVI GALLEGO: octubre 2021

miércoles, 20 de octubre de 2021

TURRÓN - CARBAJOSA - CARBAZAL - CUETO NEGRO (Viadangos de Arbás) 16-10-21

4ª TRAVESÍA “VALLE DE ARBÁS”. 2ª ASCENSIÓN A LA “PEÑA TURRÓN”.

1ª ASCENSIÓN A LA “CARBAJOSA”, “CARBAZAL” Y “CUETO NEGRO”.

(Viadangos de Arbás).

16-10-21 (Sábado)

Este sábado de mitad de octubre nos hemos acercado hasta el Valle de Arbás para coronar varias cumbres adyacentes al mismo por el Norte. Lo hicimos partiendo de Viadangos de Arbás en una ruta circular durante la cual tuvimos algún que otro incidente que no llegó a mayores consecuencias. He añadido al título lo de “4ª Travesía Valle de Arbás” ya que, a pesar de no iniciar la misma en Casares y habiendo evitado algún tramo de la misma, la mayor parte de dicha ruta señalizada como tal la hemos hecho.

Nos animamos a la misma 8 participantes: Álvaro, José Luis, Mª Jesús, Juan, Tiquio, Guiomar, Ana y yo. A las 8:30 horas nos reunimos todos en el lugar habitual para emprender el viaje en mi furgoneta y el coche de Tiquio. Un termómetro marcaba 6º C a esa hora. Con el cielo medio cubierto avanzamos por la carretera de Asturias hasta llegar a Villamanín donde hicimos una pequeña parada para tomar un café. Allí giramos hacia el valle de La Tercia y el de Arbás llegando a Viadangos a las 9:50 horas. Aparcamos los vehículos en la parte alta del pueblo, al lado de la iglesia, y nos preparamos para la ruta a una altitud de 1308 m.

Tras una foto de grupo iniciamos la caminata a las 10:05 horas descendiendo unos metros por las calles de Viadangos para salir del mismo por un camino siguiendo la ruta marcada de Cuatro Valles “El Valle de Arbás”, que ya anteriormente hemos hecho en varias ocasiones. En algunos puntos del pueblo vimos unas bonitas casitas de pájaros en las fachadas o algunos árboles. En un tronco de éstos había tallada una cara.

Dejamos atrás un área de recreo con algunos bancos, carteles informativos de la zona, una fuente, etc, etc, y tras un kilómetro escaso desde el inicio nos desviamos por el ramal que se dirige a Casares de Arbás por el collado entre la Peña Turrón y la Muezca. Este camino está menos transitado que el anterior y enseguida comienza a ganar altura entre vegetación variada, escobas, helechos y algo de arboleda. Poco a poco la vista se va ampliando y vemos Viadangos en el fondo del valle. Pasamos cerca de una fuente con pilón desde la cual el camino se fue difuminando un poco más entre la pradería.

A las 10:55 horas alcanzamos el collado de 1456 metros de altitud que comunica este valle de Viadangos con el Valle de Arbás entre la sierra del Turrón y el pico La Muezca. Desde el mismo contemplamos el macizo de las Tres Marías y la Barragana así como algunas cumbres más al Suroeste. Nos metimos desde allí por la ladera Este de la sierra del Turrón rodeando la misma por esa parte hacia el Norte, ahora ya por sendero. Seguimos ganado altura mientras girábamos hacia el valle entre esta sierra y la de Chagos, más al Norte, encaminándonos por éste hacia el collado del fondo.

Cerca del mismo nos desviamos hacia la ya cercana cumbre principal de la sierra del Turrón que alcanzamos cuando eran las 11:45 horas y tras 4,100 km hechos. La Peña Turrón tiene una altitud de 1589 m y desde ella se puede divisar buena parte del Valle de Arbás con Casares, Cubillas y el embalse tras el cual teníamos las numerosas cumbres que hace unos meses ascendimos. Por el Norte teníamos la Sierra de Chagos. Al Oeste se elevaban imponentes las Tres Marías, la Barragana y la Meloita.

Nos sacamos una foto de grupo y dejamos una tarjeta en un bote entre el monolito de piedras de la cima antes de emprender el descenso a las 12:25 horas. Lo hicimos por la misma ladera de subida hacia el collado entre ambas sierras desde el cual comenzamos a bajar por la parte contraria hacia el camino que une Casares y Viadangos a través del Collado Gistreo y del valle de Viadangos, cerrando la ruta circular de Cuatro Valles. La bajada a este camino la hicimos por un sendero entre numerosos tojos de agujas afiladas que traspasaban la ropa. Enlazamos con la ancha pista a una altitud de 1513 metros para iniciar por ella la subida bajo las verticales paredes del Palero, la “María” más baja pero más abrupta.

En las verdes praderías de la parte baja hay un refugio al que algunos se acercaron mientras otros seguimos la caminata por el camino hacia el collado Gistreo, al que no era necesario llegar. Escasos 300 metros antes del mismo nos desviamos a una vallina de la izquierda, por la que baja el arroyo de Casares, por un sendero de nuevo entre matorral que lo cerraba. Por encima, al Norte, teníamos la cima del alto de Cabachonal, de 1685 m, y que en esos momentos no ubicábamos correctamente.

Aquí voy a hacer una pequeña puntualización, ya repetida en anteriores ocasiones, respecto a las ubicaciones de las cimas en los mapas. Pues bien, en esta ocasión, varias de las cimas que alcanzamos me las ubicaba mal el GPS, o desplazadas en el mismo. También dependiendo del mapa consultado en Internet, las señala en un punto u otro. Al final ha resultado que las tarjetas dejadas más tarde en las cumbres de la Carbajosa y del Carbazal no tienen ni el nombre correcto ni la ubicación correcta.

Tras rodear el Cabachonal nos situamos en la cresta de la loma entre el valle de Viadangos y la vaguada del arroyo de Casares. Por ella subimos varios metros antes de echarnos hacia la ladera del valle del río Viadangos y meternos entre algunos pinos. Fue aquí donde tuvimos la primera incidencia que a mí me hizo pasar un mal rato. Se me metió algo en la garganta, yo creo que una pequeña broza del matorral, y no podía respirar, me ahogaba. Los nervios tampoco ayudaban a calmarme. Al final, tomando agua y con un trozo de plátano, fue pasando, aunque me quedó la garganta algo irritada y el susto en el cuerpo.

Ya más calmado seguimos subiendo por la loma que fue despejando de pinos y así alcanzamos una pequeña cima por la que pasamos sin más. Desde allí ya veíamos los valles del Oeste por donde transcurre la autopista de la que eran visibles algunos tramos. Fuimos bajando y subiendo algunos collados y cerros, marcados en el mapa como Piedras Bermechas, y así llegamos a un alto en el que había una torre de piedras apiladas entre escobas tupidas y al lado de una alambrada que cruzaba por dicha cima. Eran las 14:35 horas, llevábamos 7,700 km y estábamos a 1871 m según el mapa, en el que no indica nombre alguno. Lo tomamos por el Cabachonal, y así lo pusimos erróneamente en la tarjeta que dejamos.

Nos acomodamos en torno a este hito de rocas para comer mientras por el Oeste se cerraba cada vez más de nubarrones. Unas gotas de lluvia se escaparon estando allí, aunque cesaron en pocos minutos. Teníamos a la vista ahora hacia esa orientación las Ubiñas, Cirbanal, Mesa, Siegalavá o el Tapinón entre otros. También la sierra del Aramo con el Gamonitéiro en cuya cima destacaba la enorme antena. Por el Sur, las cumbres de Las Tres Marías, Ortigal o la Brazosa.

Nos sacamos una foto de grupo antes de seguir la marcha por la sierra hacia el Norte hasta alcanzar la siguiente cima, la Carbajosa, que consideramos como el Carbazal. Su altitud era de 1866 metros y hasta allí llevábamos 8,400 km. Solo un pequeño montón de rocas marcaba esta cima que apenas destacaba en la sierra. En esos momentos estábamos en el límite con Asturias.

Habíamos decidido parar en ella un rato, por lo que Álvaro decidió acercarse a otra más baja y que se “salía” un poco de la línea de la sierra al Norte. Por su parte, a Tiquio se le había quedado la visera en la cumbre anterior y fue Mª Jesús la que volvió a por la misma. El resto nos acomodamos aprovechando que se mantenía sin lluvia. Más tarde dejamos la tarjeta, con el nombre de Carbazal, y emprendimos el descenso hacia el siguiente collado, del que llegaba en ese momento Álvaro, que se había llegado al Cueto Negro. En este tramo a dicho collado hay otra pequeña cima de 1836 metros por la que pasamos sin saber en ese momento que era el Alto Carbazal.

Según íbamos bajando al collado íbamos sopesando subir al Cueto Negro, en el cual se veían claramente las varias edificaciones de la parte alta de la estación de ski de Pajares. Hasta el mismo no había mucho desnivel y se subía por un ancho camino desde este collado emplazado a 1805 metros. En pocos minutos, a las 17:22 h, llegamos a esta cima de 1856 metros en la que como apunté, hay varios edificios pertenecientes a la estación invernal cuyos remontes y otras instalaciones veíamos por debajo más al Nordeste. Desde el collado veníamos viendo al Norte los valles asturianos por los que bajaba la autopista y la nacional del puerto de Pajares. Al Suroeste contemplamos ahora mucho más claro la cara Norte de las Tres Marías, Ortigal y Brazosa. Parte del embalse de Casares aparecía a su izquierda e incluso de nuevo el Fontún con Villamanín bajo él. Poco más de diez minutos estuvimos allí antes de emprender el descenso por la misma vertiente tras unas fotos de grupo.

Pues bien, bajábamos hacia el collado por el camino pedregoso cuando Álvaro resbaló con una de las piedras cayendo al suelo y golpeándose fuertemente en la pierna. El golpe le dejó un tanto paralizado durante un momento y luego la molestia le hacía cojear.

Llegamos al collado desde el cual el camino se metía al valle del río Viadangos trazando numerosos zigzag por la pendiente ladera llena de maleza. El track que llevaba en el GPS bajaba muy tendido por la misma, pero por lo que veíamos, luego lo hacía directamente al valle. No estábamos seguros si lo hacía por algún cortafuegos o entre todo el matorral, por lo que optamos por olvidarlo y seguir el camino que llevábamos y que bajaba limpio trazando dichas curvas muy cerca de las torres de un tendido eléctrico. Hubo quien atajó por el medio de todo el matorral saliendo lleno de hojarasca del mismo.

A las 18:25 horas, tras 12,100 km hechos, llegamos al río Viadangos en el fondo del valle. Cruzamos el mismo y por un sendero nos adentramos en el bosque de pinos y hayas que iban cogiendo el color otoñal. Nos íbamos fijando en la ladera contraria, por la que habíamos bajado más atrás, y no veíamos lugares despejados por donde hacerlo mejor que por donde nosotros. Estaba todo cerrado de maleza. Tras un tramo por dicho sendero enlazamos con el ancho camino que bajaba de la collada Gistreo siguiendo la ruta señalizada de Cuatro Valles. No tardando abandonamos el bosque cerca de una pequeña caseta de hormigón, que podría ser de cuadros eléctricos o control de agua. Caminamos por el fondo del valle un tramo antes de volver a la vera del bosque unos metros más. En esos momentos se escapaban algunas gotas de lluvia.

Fuimos girando con el valle hacia el Sur y así llegamos a un rustico puente de troncos por el que cruzamos el río. En una tabla en su base podía leerse la inscripción grabada en la madera: “Puente del Glaciar”. Allí mismo hay un paso cementado para vehículos y pocos metros más adelante una pequeña presa de contención. Cruzamos una cancilla y llegamos a una bifurcación por la que según Mª Jesús se llegaba también al pueblo. Por detrás quedábamos ella, Ana y yo, así que decidimos, tras retroceder unos metros, coger ese “atajo”.

La lluvia ya era constante mientras avanzamos por ese camino algo menos transitado paralelo al más ancho que iba por la otra margen del río. Entre cercados de prados, y mientras anochecía, nos fuimos acercando a Viadangos. Echando la vista atrás vimos la cima del Cueto Negro con los edificios destacando en ella. No tardando pasamos un tramo cementado poco antes de entrar en el pueblo a las 19:55 horas. Ya en éste cerramos nosotros el lazo en una de las calles por la que llegaba Tiquio en ese momento desde el camino principal. Pocos metros nos restaban a los coches donde estaba el resto de compañeros y en los cuales terminamos nosotros la ruta a las 20:00 horas. El GPS nos daba estos dos datos principales: 17,400 km hechos con un desnivel acumulado de 830 m.

Seguía lloviendo, así que aprovechamos el pórtico de la iglesia para resguardarnos mientras nos cambiábamos. Tras ello emprendimos el regreso a las 20:30 horas parando de nuevo en Villamanín unos minutos. Sin novedades hicimos el resto del trayecto a León donde quedaron los compañeros antes de llegar a casa a las 22:40 horas. Un termómetro cercano marcaba 10º C.

Buena ruta la de esta jornada. Varias cumbres, buenas panorámicas y sin dificultad técnica alguna. Un par de sustos que no pasaron a más y la climatología que nos respetó la mayor parte de la ruta salvo el tramo final ya sin mayores consecuencias.

MAPA ESQUEMA