EL BLOG DE JAVI GALLEGO: agosto 2022

miércoles, 31 de agosto de 2022

PICO DEL LOBO (LA PINILLA -SEGOVIA) - CHORRERA DE LOS LITUEROS (Somosierra - Madrid) 27/28-08-22

1ª ASCENSIÓN AL “PICO DEL LOBO”. (Estación Invernal de La Pinilla - Segovia).

1ª TRAVESÍA “CHORRERA DE LOS LITUEROS”. (Somosierra - Madrid).

27/28-08-22

Fin de semana montañero totalmente improvisado en tierras segovianas y madrileñas. Tras la anulación de una ruta del grupo habitual prevista para el sábado, me decidí a llamar a mi amiga Ana, también compañera nuestra en alguna que otra marcha, y enseguida resolví irme ese mismo sábado para hacer algo cerca de su zona, Aranda de Duero. El resultado final fueron un par de rutas, llegando a tocar incluso tres comunidades autónomas durante las mismas. El transcurso de las dos jornadas fue el siguiente.

SÁBADO 27

A las 12:35 horas salía de casa hacia Aranda de Duero donde había quedado con ella. Sin novedades hice el trayecto por las diferentes autovías, la de Valladolid primero, luego hacia Burgos, para finalizar en la A-1 hacia Madrid. El cielo prácticamente despejado me acompañó a lo largo de los 260 km hasta llegar a Aranda de Duero a las 15:00 horas.

En esta población me reuní con Ana, decidiendo comer en un establecimiento cercano. Un termómetro marcaba 33º C cuando salimos a las 17:00 horas. En la furgoneta hemos emprendido viaje hacia Riaza, localidad segoviana en la que ella había reservado alojamiento en un apartamento. Durante la última parte del viaje fuimos contemplando la Sierra de Ayllón y en la misma el Pico del Lobo previsto para el día siguiente.

Llegamos a Riaza a las 17:55 horas y habiendo hecho 337 km desde casa. Nos dirigimos al complejo en el que estaba el apartamento, a las afueras del pueblo, e hicimos los tramites de entrada al mismo. La estancia constaba de una cocina / habitación / sala de estar, pasillo, baño y otra habitación. Desde las ventanas podía verse parte del complejo turístico y la sierra al Sur. Hemos dejado el equipaje y nos acercamos a un supermercado para comprar algunas cosas. Luego marchamos hasta Riofrío de Riaza, a unos 5 kilómetros, donde yo había mirado una pequeña ruta / paseo hasta una ermita y mirador. Pues bien, íbamos dispuestos a ello, pero dado la hora que era ya, las 20:40 h, que la caminata tenía 11 km de continuas subidas y bajadas, y que al día siguiente ya estaba prevista la ascensión, abortamos la misma y nos dimos un paseo más corto por el pueblo, durante el cual pudimos disfrutar de un bonito atardecer con algunas nubes y tonos anaranjados al Oeste.

Regresamos a Riaza ya de noche y nos dimos un paseo por sus típicas calles empedradas y entre los bonitos edificios del casco antiguo. Al lado de la iglesia se celebraba un concierto con numeroso público asistente. Nosotros nos sentamos en la terraza de un restaurante en la que cenamos cómodamente disfrutando de la noche veraniega que hacía.

Tras la misma, y con la furgoneta, volvimos al apartamento donde, tras un rato más de charla, tele, etc. nos acostamos.

DOMINGO 28

Me levanté poco antes de las 8:00 horas. Desayunamos y nos preparamos para la ruta de ese día. A las 9:00 horas emprendimos el corto viaje hacia la estación de ski de La Pinilla, a 12 km de allí, llegando a la misma en 12 minutos. Aparcamos en uno de los lugares acondicionados para ello y nos echamos la mochila al hombro. A las 9:20 horas iniciamos la ruta en ese punto a una altitud de 1510 metros.

De las varias opciones para subir a la cima del Pico del Lobo desde ese lugar escogí la más tendida, llevando el track en el GPS. El primer tramo transcurre entre los numerosos complejos turísticos que hay en esta parte baja de la estación invernal. Luego se enlaza con un ancho camino en el que una señal nos indicaba “Pico del Lobo - 5 km - 15% de pendiente”. Nos metimos entre un gran pinar por el que ya subía dicha pista perfectamente perfilada. Trazamos algunas curvas y nos encontramos con un circuito, o de motocross o de mountain-bike. El caso es que éste nos despistó un poco y abandonamos el camino para comenzar a subir directamente por la pendiente ladera. Enseguida vimos que se cerraba el terreno de maleza y ya comprobamos que no íbamos siguiendo el track. Tuvimos que perder algo de altura para enlazar de nuevo con el camino, por el que ahora subían más montañeros.

Cruzamos un regato, que estaba cercado por una valla ya que lo usaban para captación de agua potable, y fuimos trazando más zigzag siempre subiendo y entre el pinar, que nos libraba del sol que ya calentaba. A una altitud de 1900 metros salimos a cielo abierto para hacer los últimos metros de la subida hasta alcanzar la cresta de la sierra a las 10:50 horas tras 3,500 km hechos. Estábamos allí a 2005 metros y en otro indicador marcaba 2,000 km a la cumbre y 4,500 km al puerto de la Quesada, otro de los puntos de inicio que había contemplado. Esta línea cimera hace límite Segovia y Guadalajara y desde allí la pendiente se suavizaba por la cresta montana de la sierra. Un sendero ancho y bien marcado se dirigía hacia el Suroeste entre algunas escobas bajas. Ya contemplábamos la llanura al Norte y en ella Riaza.

Hicimos una breve parada para tomar un tentempié y retomamos la marcha cruzándonos con alguna gente que descendía y nos pasó una pareja. Alcanzamos de esa forma en poco tiempo un pequeño paso, Las Peñuelas, desde el que ya vimos la cumbre por delante de nosotros. La senda seguía ahora pocos metros por debajo de esa línea cimera hacia la parte Sur y sin apenas desniveles. En pocos minutos nos situamos bajo la misma cumbre, en la que se veía una gran estructura de los remontes de la estación. Una cómoda subida de no muchos metros nos llevó a la cima del Pico del Lobo cuando eran las 12:00 horas de mediodía y tras 5,800 km hechos desde el inicio.

Esta cumbre de 2272 metros está situada ya en Guadalajara, Castilla la Mancha, siendo la más alta de dicha provincia. La sierra en la que se emplaza se llama Ayllón y forma parte de la cordillera del Sistema Central. En su cumbre se encuentra un gran vértice geodésico así como algunos mástiles de la estación de ski, ahora abandonada en esa parte alta. Justo bajo ello, la gran estructura también desatendida y medio derruida de los telesillas que llegaban antaño hasta la cumbre misma. Todo ello refleja la desidia por parte de las administraciones que no obligan a derruir y desmontarlo todo para dejar el paraje natural como en su origen estaba.

La sierra corre de Este a Oeste, y sus cumbres más destacadas, aparte de ésta principal, son el Cerrón, en un espolón al Sur y con 2196 m, y el Tres Provincias o Pico Cebollera, al Oeste, con 2128 m, y situada justo en el límite de Segovia, Madrid y Guadalajara. La vista al Norte era la llanura segoviana con Riaza como pueblo más destacado. En las demás orientaciones todo eran montañas de esta cordillera del Sistema Central en el que aparte de esta Sierra de Ayllón, están la de Guadarrama, Cebollera, Ocejón, Somosierra, etc. etc., sumando infinidad de cumbres, desconocidas por mí.

Apenas unas nubes cubrían el cielo de momento, y tras unos fotos, nos acomodamos para comer un poco. En la cima había un pequeño grupo que bajó enseguida y llegó una pareja más tarde. No encontramos ningún buzón y al final no dejamos tarjeta. A las 13:45 horas iniciamos el descenso por la vertiente Oeste. Por el sendero de la cresta avanzamos y rodeamos un cerro rocoso por su cara Sur viendo tras el mismo una canal pendiente, pero accesible para bajarla cómodamente. El track del GPS se alejaba algo más al Oeste, pero optamos por echarnos allí mismo hacia abajo atajando un tramo. El sendero zigzagueaba un poco entre algo de roca y zonas más herbosas. Negros nubarrones habían ido apareciendo por el Sur.

No tardamos en meternos entre algunos remontes de la estación y algunas pistas de esquiar. Así llegamos a las instalaciones de un remonte qué estaba en funcionamiento. Infinidad de ciclistas lo usaban para subir con las bicis desde la parte baja y descender por los senderos y caminos acondicionados para ello. Lo dejamos atrás a una altura de 1800 metros y nos metimos poco después bajo los mismos cables del remonte. El pinar escoltaba este ancho espacio desbrozado y de fuerte pendiente por el que continuamos el descenso mientras los telesillas pasaban justo por encima de nosotros con los ciclistas y sus bicis. En algunos puntos los senderos y caminos que usaban ellos se cruzaban también bajo los remontes. En 1,500 km bajamos 300 metros de desnivel hasta la parte en la que estaban las instalaciones inferiores de los remontes. Allí mismo hay un complejo hotelero y de restauración en el cual hicimos una parada cuando eran las 15:10 horas y a una altitud de 1525 metros.

En la terraza de uno de los bares nos tomamos un merecido refrigerio mientras ahora los nubarrones oscuros estaban al Norte. Estuvimos unos minutos allí sentados antes retomar la marcha para bajar el corto trecho que ya nos restaba a la furgoneta. En pocos minutos lo recorrimos y a las 15:45 horas terminamos la ruta en el aparcamiento. El GPS nos daba como datos principales 9,700 km hechos y un desnivel de 828 metros.

Como era pronto, Ana había comentado la posibilidad de acercarnos hasta el puerto de Somosierra a ver la Chorrera de los Litueros, una bonita cascada en un cañón. Hacia allí nos encaminamos a las 15:50 horas enlazando poco después con la A-1 hacia Madrid. En pocos minutos entramos en esta comunidad y en Somosierra abandonamos la autovía hacia una carretera paralela y en sentido contrario por la que recorrimos un pequeño trecho antes de aparcar al inicio de la ruta.

Tan solo con los bastones y algo de agua iniciamos la caminata a las 16:15 horas a una altitud de 1375 metros. Nos metimos hacia un camino con dirección Noroeste cruzando una cancilla poco después. Por delante se veía la formación rocosa en la que se encajona el arroyo de la Peña del Chorro que forma dicha cascada. Este arroyo, junto con algunos más, forman poco más abajo el conocido río Duratón, cuyas famosas hoces hemos recorrido en alguna ocasión anterior en la zona de Cantalejo y Sepúlveda. El paraje superior, por lo que vi en el mapa, es el que da el nombre de Los Litueros a la cascada.

Cruzamos el arroyo de Las Pedrizas y justo antes del arroyo ya comentado, abandonamos el camino para meternos por la ladera siguiendo un estrecho sendero entre matorral y ya con más pendiente. A la izquierda fue mostrándose cada vez más claro el arroyo de la Peña del Chorro precipitándose entre las peñas. Enseguida vimos a un grupo practicando barranquismo en el mismo con todo el equipo: cuerdas, cascos, anclajes, etc., etc. Nosotros fuimos ganando altura rápidamente por la ladera de enfrente y así nos situamos encima de las formaciones aquellas a una altitud de 1512 metros. Eran las 16:50 horas y habíamos recorrido 0,851 km. Desde ese punto contemplamos parte del cañón bajo nosotros así como la autovía. Algunos pinares moteaban las laderas de aquellos montes.

Tras un rato allí iniciamos la bajada hacia el arroyo al que llegamos en pocos minutos. No bajaba mucha agua, pero los rincones en el mismo eran guapos entre roca y algo de vegetación. Lo cruzamos para seguir el sendero rocoso paralelo al cauce que se encajonaba en el desfiladero. La idea era llegar a la parte baja de la cascada principal, que Ana conocía, pero a la que no estaba segura de cómo acceder. Nos echamos por una estrecha y pendiente canaleta que tuvimos que remontar de nuevo ya que no tenía salida. Nos encontramos en otro punto justo encima de un salto que estaban descendiendo los barranquistas. No lejos encontré un bonito rincón con una cascadita y una poza que me encantó. Mientras, Ana seguía intentando recordar por donde se bajaba a la cascada.

Tras un rato bueno de subidas, bajadas, etc., nos encontramos con una joven que nos indicó la situación de la misma y por fin llegamos a su parte baja. Allí nos encontramos con el grupo que lo estaba descendiendo y otro en plan turismo. La cascada era guapa, pero con muy poco agua. Se precipitaba por la roca hacia una poza y de ésta a otra cascada que era la que estaban bajando. Estábamos a 1438 metros de altitud.

Estuvimos un rato allí antes de ponernos en marcha por un sendero directo a la parte baja. Cruzamos un tapial de piedras y luego el arroyo antes de cerrar el circulo. Ya por el ancho camino salimos a la carretera donde terminamos la ruta a las 18:45 horas habiendo hecho 2,700 km y 191 metros de desnivel acumulado.

Nos pusimos en ruta de nuevo con la furgoneta saliendo a la autovía A-1 dirección Aranda de Duero. Antes de éste, en Boceguillas, hicimos una parada para tomarnos un refrigerio en la terraza de un bar. A las 20:10 horas llegamos a Aranda donde hicimos compra en un supermercado antes de ir hasta donde Ana tenía el coche. 29º C marcaba un termómetro a esa hora. Ya en los dos vehículos nos dirigimos hacia San Juan del Monte, pueblo en el que vive Ana, a unos 15 km de allí. Durante el trayecto paré a sacar unas fotos de la puesta de sol espectacular. Llegamos a su casa a las 20:45 horas. La furgoneta me marcaba un total de 480 km.

El resto de la jornada, muy resumida. Salimos a dar un paseo nocturno por el bonito pueblo durante un rato y de nuevo en casa cenamos un poco antes de acostarnos. Por mi parte, al día siguiente tenía que estar en Valladolid muy temprano y marché directamente de madrugada con tormenta lejana acompañando.

Sin duda un buen fin de semana totalmente improvisado, pero con un transcurso y resultado inmejorable. Un par de rutas, turismo, gastronomía y buena compañía. ¿Se puede pedir mas?.

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